Tiene su aquel escuchar a los políticos y periodistas (como correas de transmisión) definirnos como “antisistemas”. Pero, vamos a ver: “antisistemas” somos todos los ciudadanos que sin compartir la violencia, no estamos de acuerdo con este corrupto sistema. Y luego se extrañan de que los catalanes quieran ‘fugarse’ de España, como antisistemas, cuando los demócratas de ‘la casta’ son los que, envueltos en la bandera rojigualda fugan sus capitales a paraísos fiscales. Esto es para ellos la democracia, sí señor. Vamos, que hasta que no llamemos a las cosas por su nombre, oiga, miren, no nos vamos a aclarar.
Podría explayarme mucho más, pero en este momento no puedo.